Esta entrada inaugura de modo oficial la tercera época de este sitio web. Y pese a lo que pueda escucharse por ahí, no llega ni pronto ni tarde sino cuando me lo propongo.

El tiempo pasa; cambian las tecnologías de la información y de la comunicación, algo que tanto de modo directo como indirecto este sitio ha sufrido ya varias veces…, casi nada. Se hacía por tanto necesario rehacer por completo la plantilla (una vez más y ya van tres).

Así pues, he reconstruido Lavondyss.net basándome en el diseño anterior lo mejor que he podido; es un diseño que me gusta mucho y deseaba conservarlo.

En mi opinión ha quedado bastante similar, tanto que apenas se notan las diferencias pienso yo. El sitio trae ahora funcionalidades actuales y el dichoso, y famoso, diseño «responsivo­». Vamos, que funciona igual tanto en escritorios como en teléfonos y tabletas.

Tal ejercicio exigió que tuviese que repasar cosas que no me apetecían y retomar tecnologías que ya no me interesan demasiado, aunque sí lo justo para dar por terminada la tarea. Así pues y ahora, a otra cosa.

Decíamos ayer…

Sobre este sitio web…, no es ningún secreto que decidí tomarme un descanso hace ya tiempo. Un descanso largo. Uno de esos que extendí desde aquí hasta las redes sociales, unas entidades por las que siento una relación de amor-odio, con un mayor énfasis sobre lo segundo.

ImagenY puede que, incluso un poquito, decidí tomarme un descanso también hasta de la mismísima afición a los juegos de rol; quién lo diría… Pero lo necesitaba, la verdad. Los motivos son más complicados de explicar de lo que parece. En fin, como dicen mis más allegados/as yo soy muchas cosas menos… simple.

Hace ya tiempo que arrastro la sensación de que tengo poco, a veces nada, que decir. Una ilusión que puede solo exista en mi mente. De cualquier modo, decidí centrarme en mis proyectos y en los libros que quiero leer, que son bastantes.

Ya no deseo gastar 3 horas cada día consultando unas redes sociales que invitan a subirse al tren de un juego bastante cruel. Ese que consiste en medir lo que eres, lo que vales y lo relevante que resultas en base a una puntuación, los «likes» y a la atención que recibes. Una trampa de la que en ocasiones cuesta escapar.

Desde las webs estáticas, con las que empecé este sitio web, a la era del streaming masivo de contenido multimedia han llovido muchos dados de veinte caras. La red no fue nunca un territorio exento de mediocridad, pero, me encuentro ahora con demasiados comportamientos que a menudo me irritan.

Siempre he confiado más en la tecnología que en las personas que la utilizan. Y es que, en mi opinión, éstas padecen un mal. Consiste en que demasiada gente no sabe utilizar la tecnología que consume.

En un intento de seguir confiando en la creatividad humana me digo… será la edad…, pero sin mucha confianza en mis propias palabras. Lo que sí puedo decir con seguridad es que prefiero aguantar menos postureo y valorar más el trabajo constante tanto propio como ajeno; y en silencio si es posible.

El año hasta aquí

Sobre este año, además de mis proyectos personales y de la reconstrucción de Lavondyss, lo más trascendente que me ha sucedido fue la entrevista que me hizo el incombustible Carlos de la Cruz y que publicó en su sitio web, La Frikoteca. Una entrevista escrita que si te interesa puedes consultar aquí, (en este enlace).

He aprendido mucho de Carlos de la Cruz. No solo de las brillantes entradas que publica en su blog sobre juegos de rol (y a ser híper constante). En relación a lo que estaba comentando dos párrafos atrás, hace tiempo me inspiró también a centrarme en lo que me gusta de mis aficiones tratando de dejar de lado lo que me perturba de éstas. En este caso en particular, lo puse en práctica en la forma de: menos redes sociales y más centrarme en mis proyectos. Esto incluye por supuesto mi sitio web, mi más preciado espacio personal en Internet.

El portafolio, la galería y el blog

Por todo esto, y por muchas más cosas que me reservo, inicio con esta entrada una nueva manera de hacer funcionar este sitio.

En su tercera época estará más enfocado a servir como portafolio de mi trabajo, proyectos e intereses, con un menor peso, tanto por funcionalidad como por diseño, a funcionar como un blog.

El diseño de este sitio web dejando todo el peso en una presencia como blog tiene un efecto colateral importante, muy fácil de olvidar. Y es que, si las fechas de las entradas se distancian mucho en el tiempo, como ha sido el caso de este sitio tan a menudo, éste parece estar abandonado… cuando no es así.

La realidad es que aquí yo he estado siempre, contestando mensajes y atendiendo preguntas y comentarios. Estoy muy presente en mi sitio web, aunque no publicase entradas durante mucho tiempo.

Escribirlas no solo exige un tiempo que ya en sí resulta escaso, demanda además andar meditando sobre la próxima entrada, y sobre la siguiente…, y la siguiente, obligándome a poner en pausa mis otros proyectos; una situación que me provoca cierta ansiedad.

Metaverso

Por otra parte, siento que todo ha cambiado mucho, con la mayoría de miradas puestas en las redes sociales y menos en los blogs. Ningún secreto ni nada que no sepas ya ¿verdad? Esto exige, como digo siempre, que sean necesarios más que nunca sitios con artículos de calidad. Algo que, de nuevo, exige tiempo y esfuerzo, cuando la verdad es que mis intereses están en otra parte.

Todo lo dicho sirve para compartir como he sentido hasta ahora, nada más. Un detalle que comento porque esto no significa que no vaya a escribir entradas con regularidad, al contrario. Sino que lo que me apetece ahora es mantener un sitio en línea que me sirva más de punto de encuentro, de carpeta de trabajos y como una muestra y seguimiento de mis proyectos.

Un sitio en el que además pueda publicar entradas de vez en cuando, comentando lo que se me ocurra, pero sin cargar con la presión de tener que mantener el flujo de entradas regulares que exige un blog para que parezca estar vivo y actualizado (o un sitio web orientado principalmente a funcionar como un blog, como ha sido el caso).

De este modo, el sitio web consta ahora de un apartado de portafolio donde puedes seguir la mayoría de proyectos en los que trabajo. Cuenta además con una extensa galería, que irá creciendo, en la que se muestra una selección de imágenes que definen, pienso yo, mis actividades en el transcurrir del tiempo y de este sitio en particular.

Por último, el blog sigue y siempre seguirá ahí, fusionando la parte de blog y de noticias de su diseño anterior. Aunque ahora funcionará, eso sí, en un segundo plano. Su fin es publicar novedades y otros contenidos que considere relevantes o de interés, y que desee compartir contigo.

Todos los contenidos antiguos, ficheros y documentos siguen estando disponibles para descarga. Solo tienes que visitar las páginas correspondientes del portafolio.

Sin más y como ya comenté, pero deseo volver a repetir, aquí estoy, siempre disponible, para cualquier duda o consulta que desees hacerme. He habilitado herramientas para que enviarme mensajes sea lo más sencillo posible.

Seguimos juntos en la red. Un abrazo y hasta pronto.

Edanna

Edanna, sello personal