Poniéndome al día con el Desafío, que la cosa no está para prisas, incluyo las respuestas a las preguntas 7, 8 y 9 en esta entrada.

desafío 30 días

Pregunta 7: Una ciudad no solo la configuran sus edificios y construcciones, sino también los ciudadanos que la ocupan. En este caso no nos interesa que nos cuentes una de esas personas. Una a una, serían muchas las historias a contar. Así que vamos a centrarnos en los grupos. ¿Qué comunidad, grupo, gremio, etc. conoces que habite e influya en la ciudad o sus alrededores?

Bajo las calles de la ciudad antigua, allí donde se levantaron las primeras construcciones, existe una modesta red de catacumbas. Fueron excavadas por los padres fundadores hace mucho para refugiarse de los frecuentes saqueos y ataques de bestias voladoras de aquellos tiempos.

Salvo unos pocos ciudadanos con muy mala reputación y escasa credibilidad, la mayoría de los habitantes de Highdell desconoce la existencia de esta red de túneles. Los pocos que escucharon hablar de ellas están convencidos de que fueron sepultadas hace mucho tiempo y tapiados todos sus accesos. Lo cierto es que estos salones subterráneos han venido sirviendo de refugio a una vasta familia de vagabundos, rateros la mayoría, que han encontrado en ellas el lugar perfecto para refugiarse. Allí tratan de salir adelante, ignorados por los ciudadanos y sujetos a un despiadado código que más que buscar el bien común lo que favorece es que medre el más fuerte y todos los que les son leales. A su líder lo denominan El Duque. Un título al que para acceder hay que estar dispuesto a ir un paso más allá de lo que significa hacer un baño de sangre. Su figura siempre va acompañada por El Maestro, uno de los miembros de mayor edad y experiencia que por méritos propios pasa a ser su mano derecha, actuando de consejero y lugarteniente.

Pocos son los secretos que se esconden para los habitantes de las catacumbas, pues no hay edificación en Highdell que no conozcan, familia de la que no estén enterados de sus trapos sucios o cotilleo que no tengan a mano para poder compartir por el precio de unas pocas monedas. Las catacumbas son además el lugar perfecto para plantar las semillas de una revolución y según algunos rumores hace ya tiempo que éstas han comenzado a dar sus frutos. Quien esté en el poder en el momento de la cosecha podrá aspirar a ser el señor de algo mucho más importante que una red de túneles polvorientos.

 

Pregunta 8: En todas las historias de leyenda en algún momento se habla de objetos maravillosos y fantásticos. En algunas ocasiones son armas, y en seguida nos viene a la mente la poderosa y determinante Excalibur, pero otras nos acompañan como nos acompañaron en los sueños. Dardo, las Dragonlance o las famosas espadas gemelas de Elric acompañaron con sus leyendas las historias que leíamos. También leíamos de otros objetos maravillosos. ¿Que si un Anillo Único, que si unas Botas de Siete Leguas o un Arpa de Oro, que si un Vellocino… que objeto maravilloso podrán encontrar unos aventureros en las inmediaciones de Highdell? (Importante el tener en cuenta lo de las inmediaciones…).

Cubierto de polvo y telarañas, un inquietante elemento del mobiliario yace oculto en los sótanos de la fortaleza abandonada de ALTATORRE (enlace). Cualquier curioso que pasara junto a él explorando el complejo podría ignorarlo con facilidad, razón por la que su naturaleza ha pasado desapercibida. Se trata de un potro de tortura muy especial ya que es el único instrumento creado para robar una vida y para devolverla; pero eso sí, pagando siempre un alto precio. Los orígenes de su construcción y cuál fue su propósito original ya se han olvidado. Por suerte, oculto en la misma lóbrega mazmorra existe un libro que cita el artefacto y cuenta algo de su historia; aunque los ratones, el fuego y los muchos años pasados hacen muy difícil descifrar su escritura.

Consiste en un potro doble, es decir, con espacio suficiente para dos seres de tamaño humano. En uno de los espacios se sujeta a quien se desea traer de nuevo a la ida y en el otro a una víctima, o donante, que será quien deba pagar por el privilegio. El procedimiento te lo puedes imaginar: mientras se acciona el mecanismo que tensa el cuerpo y descoyunta las extremidades se va robando poco a poco la vida del sacrificado, que pasa al receptor. Éste va ganando color en las mejillas y la sangre volviendo a circular por sus venas, recuperando así la salud. Finalmente, cuando la víctima da su último estertor de igual modo despierta el resucitado, que toma su primera bocanada de aire no sin dificultad y con el justo grado de violencia que merece la ocasión.

Los resultados no están garantizados si el procedimiento no se hace correctamente. Por lo que para tener éxito debe llevarse a cabo lentamente, sin prisa, a ser posible por un entendido en las artes de provocar sufrimiento. De este modo es imperativo provocar la mayor agonía posible a la víctima, lo que le dará al resucitado mayores posibilidades. En caso contrario el proceso termina con dos cadáveres corrompidos antes de tiempo tendidos sobre el artefacto y… con un nuevo contratiempo.

Los instrumentos creados con tan siniestro propósito muy rara vez están exentos de consecuencias, un detalle que casi todos los que han usado el artefacto tienden a olvidar. Y es que el resucitado adquiere además algo del pobre desgraciado que ha servido de donante: un recuerdo, un rasgo importante o un hito trascendente que marcara su vida. Puede tratarse de muchas cosas diferentes pero todas tienen algo en común, siempre se trata de algo que le complica su vida trayéndole la desgracia tarde o temprano. Un precio justo en mi opinión por retorcer de forma tan macabra las leyes de la naturaleza.

 

Pregunta 9: Espera, espera, espera… ¿todavía no hemos hablado sobre dungeons? Pues ya es hora, y más si estamos situándonos en un ambiente medieval fantástico. Seguro que alrededor de Highdell conoces un dungeon. Una sucesión de cavernas, un sótano que se abre a una sección de las alcantarillas medio enterradas, una torre cuyos subterráneos se encuentran por explorar. Por favor, cuéntanos lo que sepas de dicho dungeon.

Jonás el inventor estaba tan obsesionado con alcanzar el otro lado del mundo que pasó 15 años en el sótano de su casa tratando de encontrar un medio de conseguirlo. Pero tanta dedicación dio al final sus frutos pues le permitió inventar —y construir— una máquina colosal; aunque tanto empeño le costara el que fuese abandonado por su esposa que, agarrando a los niños cada uno de la manita, un día se largó con ellos dando un portazo. El pobre Jonás se enteró 3 días después de tan absorto que estaba en su trabajo, y es que siempre fue muy despistado.

Pero volviendo a la máquina que seguro es lo que en realidad te interesa, ésta consiste en una sofisticada perforadora accionada con algo que unos considerarían magia y otros algún tipo de ciencia extraña. En realidad depende del punto de vista e incluso ni así estaría muy claro. Pero en fin, el prodigio, con una barrena de casi 3 metros de diámetro por 9 de largo de forma cónica da paso a un habitáculo capaz de albergar a 4 personas, algunos pertrechos, un perro y algunas gallinitas si hace falta. En total un vehículo muy cómodo diseñado para alcanzar el centro de la Tierra y si hay suerte salir por el otro lado, aunque se haga boca abajo.

drillUn buen día el bueno de Jonás, teniendo ya poco que perder, accionó su máquina y comenzó a perforar tan y tan profundo que pasaron semanas y semanas de duro viaje, dejando detrás suyo un larguísimo túnel que aún hoy permanece accesible desde el sótano. Durante su odisea, el calor aumentaba y las condiciones se hacían cada vez más penosas. Pero al vigésimo octavo día tras derribar un muro de rocas una luz brillante cegó sus ojos, acostumbrados ya a la eterna penumbra del candil. Cuando recuperó la vista, allá abajo, en algún lugar distante, descubrió una inmensa caverna de cielo imposible y mares tempestuosos. Torrentes de agua centelleante que caen desde lo alto salpican las laderas cuajadas de diamantes, y una brisa fresca que siempre sopla del oeste mantiene en el aire a criaturas voladoras, que pescan sobre las aguas del mar interior en un nuevo mundo iluminado de pálida luz de naturaleza desconocida; uno que escapando a toda comprensión estaba allí, esperando ser explorado.

A orillas de este gran mar yace ahora abandonada en alguna parte la máquina de Jonás. Junto a ella, una flecha confeccionada con piedras señala la última dirección que tomó antes de partir. Y justo allí, con un jirón de su camisa atado a un palo señalando el lugar, se marca el lugar donde aún puede leerse escrito con lápiz de carboncillo y no poca dificultad: "Aquí estuvo Jonás. Solitario eremita, mal esposo y por siempre doliente amante; cavador de agujeros, inventor entusiasta, estúpido, miserable y loco, pero siempre soñador…, descubridor y fundador de naciones. Si crees en mí sigue tu camino audaz viajero, y llegarás al nuevo mundo como una vez, hace ya mucho tiempo, hice yo".

Edanna
9 de noviembre de 2015

Edanna, sello personal